Para aquellos intrépidos viajeros que tienen previsto viajar a China, voy a intentar daros una serie de recomendaciones según mi experiencia basada en al menos unos 30 viajes aquí:
1. Elección de las fechas del viaje: antes que nada por favor revisad el cuadro de fechas de esta entrada para evitaros coincidir con estas fiestas o bien unos días antes. Por ejemplo, los 15 días anteriores al Año Nuevo Chino, los vuelos van llenos de chinos residentes en Europa que quieren volver por vacaciones, y el coste aumenta de precio.
2. Elección de la aerolínea: todas son exactamente igual de buenas (o de malas) por lo que mi sugerencia es que escojáis siempre la más económica. Os sugiero que empecéis buscando en esta página http://www.es.lastminute.com/site/viajes/vuelos/ donde están incluidas la mayoría de aerolíneas, y que pulséis la opción “mis fechas son flexibles”. Así tendréis siete días posibles para elegir la mejor opción.
3. Elección del asiento: los mejores asientos en turista son los de la salida de emergencia, así que reservad el asiento lo antes posible, y si está ya reservado, intentad siempre coger ventanilla (mi sugerencia) para evitar ser molestados antes que pasillo, pero sobre todo, nunca en medio de varias personas, es muy incómodo. Recordad que podéis viajar con familias chinas con niños llorando y las que siempre llevan mucho equipaje de mano, con lo cual es mejor estar lo más aislados posible por lo siguiente:
4. Duración del vuelo y jet-lag: el vuelo nunca es directo y pasamos por otro aeropuerto en la mayoría de los casos. Esto significa 2 horas iniciales + 2 en el aeropuerto europeo + 10-12 horas de vuelo hasta China, total 14 a 16 horas. Esto se hace eterno, y muchas veces llegamos a China a primera hora de la mañana, así que nos queda todo el día por delante. Mi sugerencia es tomar una pastilla para dormir, la cual al menos nos hará descansar 6-8 horas del vuelo largo y de esta manera además, conseguimos descansar para intentar pasar nuestro primer día en China sin mucho cansancio, y aguantar hasta la noche venciendo el jet-lag, porque en China son 6-7 horas menos que en España, así que a las 10h de la mañana en China, serán nuestras 3-4h de la madrugada y estaremos destrozados buscando una cama, lo cual puede hacer que no cojamos el nuevo horario y el jet-lag nos destroce.
5. Visado: recordad que para viajar a China hay que sacar el visado, bien en la Embajada China en su pais, o en el Consulado Chino en su pais de origen. El visado tiene diferentes costes que podéis revisar en estos enlaces, pero tarda una semana para que sea económico. Si lo queréis para el mismo día, es posible, como todo, pero a un precio superior que veréis también indicado. Intentad hacerlo con tiempo y si no vivís en estas ciudades, hay agencias de viajes que hacen el trámite por mensajería, aunque de nuevo a un precio superior. Pero ojo, son visados de una entrada, con lo cual no podrás visitar otras zonas como Hong Kong o Macao, las cuales para China supone una nueva salida y entrada del país. En este caso se necesita un visado de dos o múltiples entradas.
6. Moneda: el Yuan o RMB (“Ren-min-bi”) no puede cambiarse fuera del país. Esto significa que sólo podemos llevar Euros o Dólares (recomiendo lo primero porque con los dólares pagaríamos doble cambio y comisión) y cambiar una vez estemos allí. Recomiendo cambiar en los hoteles o en los bancos según el cambio que ofrezcan pero preguntar si os aplicarán luego comisión, que a veces no la incluyen. El mayor problema es que a veces necesitamos dinero en el mismo aeropuerto para un taxi, tren o medio de transporte. Entonces, preguntar cual es el mínimo que cambian y cambiad allí sólo una pequeña parte, ya que hay pequeñas oficinas incluso al recoger las maletas. El cambio habitual desde hace unos meses es de 10RMB = 1€ aproximadamente, con lo cual cualquier precio en China tendréis que quitarle un cero al final o dividirlo por 10 para tener el precio en Euros, pero siempre aproximadamente, fluctúa un poco.
7. Vacunas: aunque oigáis mucho al respecto, no es necesario y os recomiendo no vacunaros de nada. China es un país sucio, no nos engañemos, y cualquier día me ganaré un premio escribiendo sobre los lavabos de ese país (ya me entendéis) pero no es necesario vacunarse. Eso sí, traed medicinas tipo paracetamol, ibuprofeno, y los siempre útiles “anti-diarréicos” por cambios de agua y cualquier problema con la comida china.
8. Comida y bebida: la comida china es exquisita y muy barata, y no tiene nada que ver con los Restaurantes Chinos que existen en España, que tienen una calidad media-baja. El problema suele venir cuando no hay carta o está sólo en chino. En ese caso, cuando ya estás sentado, mi último recurso es saber 2 platos estándar que son “Tan Chao Fan” (pronunciado así, no escrito así, arroz frito 3 delicias) y “Chao Mien” (espaguetis chinos) que te sacan del apuro. En cuanto a la bebida, al no ser el agua embotellada en algunos casos, siempre es más seguro acudir a las cervezas (“pingda” normalmente ya quiere decir fría, pero sobre todo, aseguraros que viene fría, porque ellos suelen servirla natural) cuyas marcas varían según la región, pero la marca TsingTao (pronunciado “jingtao”) suele estar presente en la mayoría de ellas.
9. Electricidad: no hay problema, utilizan 220V y un enchufe plano, con lo cual basta con llevar un conversor de clavija redonda (la nuestra) a plana (la suya) para poder utilizar nuestros aparatos eléctricos.
10. Transporte: además del avión el cual no es muy caro entre ciudades interiores y que os recomiendo, está el tren de alta velocidad que cruza el país, el de HongKong-Shenzhen-Guangzhou y el que está en construcción entre Pekin-Shanghai-Guangzhou. El resto de trenes en China da miedo por su lentitud, paradas en todos los apeaderos y aglomeraciones de personas, así que hay que evitarlo y sólo nos quedarían los autobuses, que aunque son más cómodos, son igualmente peligrosos por la forma de conducir en China: se adelanta por cualquier carril y tocar el claxon es avisar de que estás ahí, por lo cual se toca a cada rato. Por todo lo anterior, recomiendo los viajes en avión y sólo tomar autobuses cuando no haya otra opción porque el tramo es corto.
11. Hoteles: hay hoteles muy baratos en China como Motel 168, que ofrece precios por debajo incluso de los 15 USD en grandes ciudades en algo similar a los Ibis aquí en Europa. En caso contrario, lo mejor es solicitar a algún amigo chino que os haga la reserva allí, ya que la misma habitación y hotel reservada desde aquí puede duplicar su precio, ya que en China se ofrecen grandes descuentos. Yo he llegado a dormir en un hotel 5*GL por sólo 40 USD gracias a una empresa que tenía un descuento con el hotel. Esto también se aplica en los vuelos interiores, ya que hay descuentos por Internet que llegan al 50% si se reserva con días de antelación. Si no conocéis a nadie en China, contactanos en el e-mail : k.marchant@chanmastercorp.com e intentaremos ayudaros.
12. Idiomas: es muy difícil encontrar a alguien que hable español, así que hay que utilizar el inglés, y hay que reconocer que en la calle, el inglés que dominan ellos es muy básico y debe ir acompañado de señas para acabar la información. En China se habla el mandarín, y sólo en el area de Guangdong y alrededores se habla cantonés, aunque nosotros sólo hablamos mandarín, nos entendemos sin problemas.
13. Otras sugerencias:
- Mercadillos: visitarlos en cada ciudad, ya que aunque no compréis, el bullicio que encontraréis vale la pena. También hay mercadillos de copias, aunque no os lo recomiendo, pero sí artesanía china la cual sale barata si sabéis regatear. Importante utilizar “Tai kui la” (tai guile) (muy caro) cuando os den un precio, y si veis que no baja lo suficiente, marcharos del puesto, que ya os llamará “friend” para que volváis a la negociación. Si no es así, es que habéis llegado al precio en el que ya no gana nada y debéis aumentar vuestra oferta.
- Lavabos: son letrinas del típico agujero en el suelo, y nada limpios, así que armaros de paciencia y si es posible, salid con todos los deberes cumplidos del hotel, de los pocos lugares donde veréis un lavabo “europeo” en condiciones.
- Costumbres: los chinos eruptan (señal de buena salud) durante las comidas y escupen habitualmente en la calle, además de chillar mucho cuando hablan entre ellos. También son muy pesados para venderte algo, pero suelen entender cuando molestan. Y lo peor de todo es que prefieren el agua caliente (beneficia mejor al cuerpo) a la fría, así que aseguraros de pedir agua fría. Recordad que son mentalidades y culturas muy diferentes, así que preparaos para todo,
- Higiene: los restaurantes de ciudades pequeñas reciclan los palillos, con lo cual os recomiendo aceptar el té caliente que os ofrecerán para al menos utilizarlo para “desinfectarlos” en caso de que no hayan sido bien lavados.
- Seguridad: En China existe la pena de muerte por robo, por lo cual no se arriesgan a realizar un robo y es un país bastante seguro. En resumen, los chinos son amables y hospitalarios, aunque a veces sus atenciones no las entendamos. Un último consejo: no saben decir que no, así que aunque recibáis un sí por respuesta, aseguraros que lo han entendido, o si no luego os llevaréis una sorpresa.